Buscando la foto de los zancos, me doy cuenta que tengo en este momento las mismas preocupaciones.
Hay cosas que no cambian nunca (o sí?, por las dudas prefiero no perder la esperanza aunque sea remota de convertirme en una persona eficiente y organizada).
Tengo que terminar 2 trabajos para mañana y necesito concentración urgente.
Me parece que acá no la voy a encontrar y en mi casa tampoco.
Vino de visita la perra del vecino (cachorra de labrador) un rato nada más mientras su dueño hace las compras.
Va y viene por toda la casa. Nos pasamos sacándole de la boca objetos potencialmente atragantables. Saltando, casi da vuelta el zócalo de mármol que hace las veces de mesa apoyado sobre un pie de máquina.
Parece que mi casa es más peligrosa para perros que para chicos. Mis hijas están felices con la perra y la verdad es que es buenísima pero si alguna vez tenemos perro va a tener que ser más chico y claramente ahora no es el momento.
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